Con la vista puesta en los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS) y la Agenda 2030, la economía alternativa y solidaria tiene un ejemplo en Guadalajara de su compromiso con las alternativas a las grandes empresas. Econactiva es una cooperativa integral que desarrolla servicios energéticos renovables, y que está formada por usuarios, profesionales y productores. Los usuarios son aquellos que utilizan la energía verde en sus hogares, pequeñas empresas o ayuntamientos; los profesionales, los que ofrecen sus servicios para asesorar y mejorar el consumo de energía verde a todos los socios de la cooperativa; y los productores de energía renovable, los que ofrecen sus plantas generadoras de energía verde conectada a red para el consumo de esos socios.
De estos tres pilares y del contexto de la economía social hablamos con Ramon Arizala, presidente de Econactiva, y Waldir Aguilar, responsable de toda la acción social de la cooperativa:
Waldir desgrana que Econactiva se sustenta fundamentalmente en la comercialización de la energía cien por cien renovable, en distintos proyectos de autoconsumo, en bombeos solares, en proyectos de conexión a la red y en otros programas más técnicos directamente relacionados con los ODS y la Agenda 2030. Esta última es un reto de gran calado que, añade Ramón, supone “una auténtica revolución” a nivel municipal y de gestión pública, puesto que es el camino por el que Unión Europea va a administrar financiaciones locales.
El objetivo principal de esta cooperativa es tener, con toda su labor, “capacidad para influir”, explica su presidente. “Nos hemos marcado como objetivo llegar a 1.500 consumidores y a un número equivalente de socios. Estos últimos además pueden “aparaguar-apadrinar” a otras personas sin necesidad de hacer la aportación. De esta forma, «influimos en un sector económico con un impacto social muy importante”.
También mantiene esta entidad los dos pilares de la Red de Redes de la Economía Alternativa y Solidaria (REAS): trabajar para el territorio y la defensa del medio ambiente. Y además de ello, se ha constituido bajo el principio de integralidad, es decir, agrupando a empresas que prestan servicios, lo que les permite llevar a cabo proyectos más amplios. “En el fondo somos una cooperativa de perfil industrial, que es algo más extraño de encontrar en el territorio. Mientras que la mayoría de cooperativas de la comunidad autónoma están dedicadas al sector agropecuario y servicios, nosotros creamos una cooperativa que desarrolla conocimiento y aplicaciones, contamos con un perfil productivo. Tenemos la capacidad de actuar en un sector que requiere un conocimiento muy elevado para poder llevarlo a cabo”, subraya Ramón.
Educación y emprendimiento social
Sin embargo, este trabajo no olvida la parte social. Este desarrollo lo lleva a cabo Waldir y supone “dar apoyo a cualquier socio o socia interesado en realizar sus proyectos tanto de carácter energético como local, y siempre dentro de REAS”. Ahí es un factor clave la labor educativa de Econactiva, que realiza talleres sobre los ODS para colegios. “Al final, van a ser los niños y niñas los que pueden desarrollar esos objetivos. Es muy importante que conozcan esa agenda”.
Ambos animan por tanto a emprender desde la economía social. Waldir está convencido de que se trata de invertir capital en la sociedad para “repartir y equilibrar la economía”. Por su parte, Ramón recalca que la economía social no es sino una forma “más respetuosa con las personas de entender la economía”. “No es un modelo utópico, es un modelo real y pragmático que tiene en cuenta cuestiones como la conciliación, el bienestar de las personas, la visión de futuro y esto lo hace más social. No sirve para nada explotar una economía cortoplacista que nos deja sin recursos a futuro y que, por mucha riqueza que reparta, al final nos va a producir una escasez enorme. Crear riqueza es creer en uno mismo y por otro lado contribuir al entorno y al territorio en el que se produce”, concluye.
